Payasos asesinos del espacio exterior

Hay películas que por su mera existencia merecen ser vistas. Ésta es una de ellas. El título es una sinopsis en si mismo, por lo que si eres lo bastante frikazo como para querer verla y provocarte una diarrea mental, no leas más. Si por el contrario eres una persona equilibrada y de provecho para la sociedad, puedes quitarte el gusanillo de la curiosidad con esta... película destripada:

Un grupo de jóvenes están a lo suyo en el típico acantilado americano en el que se aparcan los coches para darse el lote, cuando una extraña luz cruza el cielo. ¿Qué hacer? ¿Seguir magreándose o ir a echar un vistazo como unos gilipollas? Pues la segunda opción, por supuesto. Una pareja se adentra en el bosque en busca de esa lucecita misteriosa cual polillas retrasadas, encontrando una carpa de circo luminosa. Esta carpa previamente había sido descubierta por un granjero y su perro, escena casi idéntica al inicio de "La masa devoradora", de la que hablaremos también esta semana.

Pero volviendo a la pareja de imbéciles, deciden entrar a la carpa de circo. La muchacha no estaba muy convencida, pero su novio le da un empujoncito con un sutil "¿qué te da más miedo, entrar o que te deje aquí fuera sola de noche?". Una vez dentro, descubren una serie de cadáveres envueltos en una especie de algodón de azúcar, custodiado por... sí, payasos asesinos del espacio exterior.Concepto estúpido en el cual los extraterrestres tienen forma de payaso y de ahí es de donde la humanidad copió el personaje de circo. Por supuesto, tienen pistolas que disparan palomitas, perros rastreadores hechos con globos, tartas de ácido y demás artilugios circenses que emplean para matar/dar por culo. Quitando lo absurdo, si te metes en la historia hasta llegan a gustar. Y ojo, es una película de prácticamente serie B, pero los payasetes están relativamente bien hechos.

Total, que la pareja acude a la policía, donde trabaja el exnovio de la moza en cuestión, se ve que el tío los cree, van a investigar, un par de "oh cielos, teníais razón" y "te lo dije" y nos encontramos de nuevo en la carpa con el poli, la pareja y dos hermanos tontuzos que están para hacer bulto. Al final aparece un superpayaso gigante estilo monstruo final de videojuego, que se muere (explotando en luces y polvillo de colores) disparándole en la nariz, como no.

Una mierda embotellada si no estás curtido en estas lides de la serie B, pero una joya para los gourmets de la creme de la merde del cine baratuzo. Casi me atrevería a recomendarla, pero como no quiero que me encierren en un psiquiátrico, os diré que es muy buena para pasar un ratejo entretenido, sin más. A mí me encanta verla de vez en cuando, no voy a mentir.

VALORACIÓN: Buena