El resplandor

Aprovechando la semana dedicada a Stephen King y como carta de presentación en este blog, me gustaría hablar un poco sobre "El resplandor". Una de las primeras adaptaciones al cine de los libros de este autor (cuando aún no era tan conocido), y para mí de lo mejorcito de la cosecha y, en general, de la historia del cine de terror.

Un argumento es su director, Stanley Kubrick, uno de los grandes del cine. Sin embargo prefiero no profundizar más en su trabajo porque acabaría hablando sólo de él en el post. Dicho esto y contagiada de la violencia del ciclo de este mes, ataco:

Jack, (Jack Nicholson) es un escritor que acepta el trabajo de vigilante de un complejo hotelero alpino durante el cierre de invierno. Esto implica un completo aislamiento del resto de la civilización durante los 5 meses en los que la nieve incomunica el lugar. Durante ese tiempo solo le acompañarán su mujer y su hijo Danny, un niño con cierto poder mental.

Sin darnos tiempo a acomodarnos en el sillón y coger el cuchillo ya se nos sirve la carnaza. Jack, antes de ser contratado mantiene una entrevista con el gerente del hotel. Al principio todo son formalidades pero cuando ya se acerca el final de la conversación el entrevistador le confiesa un pequeño detalle del pasado del hotel a Jack:  Resulta que un predecesor en el puesto, también padre de familia, perdió la cordura por ese aislamiento- del que tanto se advierte- y asesinó a su familia a hachazos. Pero es que poco después de esta revelación y antes de que pasen 10 minutos de película ya aparece una ola de sangre arruinando uno de los pasillos del hotel. (Por si te quedaban dudas del género de la película).

Y como pasa con la buena comida, que es mejor saborear a que te lo cuenten, lo dejaré ahí. Para pelis malas destripadas es mejor leer a mi compañero que es un artista haciéndolo.

Así pues lo único que me queda es destacar algunos detalles que para mí la hacen recomendable:

El primero es la capacidad de contar la historia para que haya tensión durante toda la película sin necesidad de oscuridad o sobresalto a cada giro de esquina.
El segundo está más relacionado con la realización y no es otra cosa que el seguimiento con la cámara de los paseos del niño con el triciclo por los interminables pasillos del hotel. No sé, me hipnotiza.
Y por último, el buen trabajo de los actores que encarnan a los personajes. Señalo esto porque no suele abundar en las películas de miedo. (Recuerda a Paris Hilton en 'La casa de la cera'). Destacaría especialmente las expresiones faciales de Jack Nicholson, que no puede parecer más tocado e inspirar más pánico. Sin embargo es cierto que la carita con la que vino al mundo ayuda bastante.

Con todo espero que no os defraude.

PD: Si a parte de esta te decides a ver Misery, otra de las seleccionadas para comentar en esta semana, creo que empezarás a ver las máquinas de escribir con otros ojos. Ahí lo dejo.