martes, 12 de agosto de 2014

Jumanji

 
 
Como justo homenaje a Robin Williams, voy a aprovechar hoy para hablar de mi película favorita de su filmografía: "Jumanji"


¿Qué chaval de mi generación no habrá soñado con echarse una partida de Jumanji? No recuerdo cuantos años tendría cuando la vi, pero supongo que unos 10 o cosa así. Y en aquellos tiempos, una ciudad invadida de animales salvajes era el nova más de lo flipante.


Y es que Jumanji es un juego maldito, que atrapa en una partida de vida o muerte a quien se atreve a jugar a él. Eso es lo que le pasa a Alan Parrish a finales de los 70, quien encuentra el juego por casualidad y decide empezar una partida con su amiga Sarah. Pero Alan tiene tan mala suerte que en su tirada queda atrapado en el juego. Sarah huye despavorida y todos dan por muerto a Alan. Veintiséis años después, unos chicos se mudan a la antigua casa de Alan, encuentran el juego y deciden empezar una partida. Pero realmente están continuando la que Alan empezó. Ahora tienen que terminar el juego entre los cuatro si quieren que todo vuelva a la normalidad.


Jumanji es una oportunidad de ver a Robin Williams en uno de sus papeles más memorables, así como de una jovencísima Kirsten Dunst y al niño mono, del cual no he vuelto a saber nada.


Aquí Robin Williams tiene unas pintazas muy similares a las de Zach Galifianakis en la trilogía "Resacón", su personaje se llama Alan y está bien loco. ¿Casualidad? No lo creo.


Y como dato, he de decir que ahora parece un poco evidente, pero cuando era un crío no me di cuenta de que el cazador del juego y el padre de Alan eran el mismo actor. Alucinado me quedo con lo inocente que era de pequeño.

Total, que Jumanji es una película más que recomendable. Muy probablemente la pongan en televisión próximamente, tras la muerte de RobinWilliams, así que no es mal momento para echarle un ojo.

EXTRA: Siempre recordaré un día en el instituto, en el que estábamos dando clase y había mucho ruído en los pasillos. Yo, ni corto ni perezoso me puse de pie y grité: "JUMANJIIII". Y se hizo el silencio. Y no me cayó un castigo. Algo milagroso.

Adiós a Robin Williams

Adiós a Robin Williams. Adiós a la Sra. Doubtfire. Adiós al genio de Aladdin. Adiós al hombre bicentenario. Adiós al Peter Pan maduro. Adiós a un gran actor que nos dejó grandes comedias (y por qué no decirlo, alguna que otra buena actuación dramática).
El actor fue encontrado ayer en su domicilio muerto, tras un presunto suicidio. Todo el mundo sabía de sus adicciones y depresiones, así que he de admitir que no estoy sorprendido del modo en que nos ha dejado. Pero eso no hace que el mal rollo sea menor. Parece mentira que un actor que ha hecho sonreír a tanta gente tuviera problemas tan serios como para acabar con su vida.
Yo siempre lo recordaré por sus papeles en "Flubber", "Jumanji", "Hook", "Sra. Doubtfire" o "El hombre bicentenario". Sin duda en los próximos días las cadenas de televisión nos bombardearán con reposiciones de sus películas más emblemáticas, así que os recomiendo que os aprovechéis y le deis un segundo visionado a todo aquello que podáis (o nuevo visionado, según proceda).
Descanse en paz.

viernes, 8 de agosto de 2014

El hombre elefante



Rodada en blanco y negro, con un Anthony Hopkins jovenzuelo y un John Hurt irreconocible, esta genial película da el pego como si fuera uno de los clásicos de los años 40-50. Llevaba tiempo queriéndola ver y anoche lo conseguí en TCM.


La historia se basa en el personaje REAL Joseph Carey Merric, también conocido como "el hombre elefante". John Merric es un jóven que ha tenido deformidades abominables en su cuerpo desde que era un bebé, y no tiene más remedio que ganarse la vida luciéndolas en un circo de los horrores mientras es explotado por un despiadado patrono. Pero todo cambia cuando un cirujano le descubre, y decide llevarlo a su hospital para estudiar sus deformaciones. Pero tras el primer contacto, el cirujano y resto de su entorno se dan cuenta de que John no es una atracción de feria sin sesos, sino que es un joven de modales exquisitos que se comporta como una bestia asustadiza debido a los años de tortura a los que ha sido sometido.


Nominada a 8 premios Oscar, no se llevó ni uno. Los que me llevéis leyendo un tiempo conocéis perfectamente mi opinión respecto a los Oscars: TONGO. Es alucinante que una película tan maravillosa como es "El hombre elefante" no tenga ni un triste premio Oscar, aunque solo sea para que la gente que se guía por los premios que gana una cinta para verla, saque tiempo para ver esta joyita. Y me parece un poco fuerte que no estuviera ni nominada a mejor película, aunque hay que tener que entre las cinco nominadas estaban "En busca del arca perdida" y "Carros de Fuego" (ganadora ese año).


Tan bueno fue el trabajo de maquillaje de Christopher Tucker (de quien me voy a molestar en estudiar en qué películas ha participado), que desde 1981 se instauró la nueva categoría de mejor maquillaje en los Oscars tras el aluvión de críticas que recibió la academia por negarse a dar un premio especial al maquillador por su fabuloso trabajo (volvemos a mi teoría de la imbecilidad supina de los encargados de repartir los Oscars).

Atención, porque este es el pobre y VERDADERO John Merric

Resumiendo, hay que ver esta película sí o sí, para darnos cuenta una vez más de lo asquerosamente estúpido que es el ser humano muchas veces. Y de que a pesar de todo, también hay gente interesante una vez salvadas las apariencias físicas.