lunes, 17 de septiembre de 2012

El Hundimiento


Siempre he sido una amante de las películas en v.o. así que con “El Hundimiento” (Der Untergang) no iba a ser menos, sobre todo porque el alemán siempre me ha parecido un idioma mucho más crudo, y escuchar a Hitler despotricar en su lengua materna me hacía sentirme un poco más dentro de la historia, que por otra parte ya me había enganchado con solo ver a un Bruno Ganz metido en la piel del dictador, quizás la mejor caracterización que he visto nunca, acompañada de gestos cuidados hasta el más mínimo detalle. Una pena que se quedara a las puertas del Oscar, yo creo que era merecidísimo.


Basada en el libro de Joachim Fest "El Hundimiento" y en las memorias de Traudl Junge, su secretaria personal, es una película larga, con momentos que yo quizás me hubiese ahorrado porque no aportan gran cosa, o incluso los hubiese cambiado por un poquito más de acción, ya que no nos dejan ver más que escenas sueltas y puntuales de bombardeos, pero aún así me sigue pareciendo que merece bastante la pena verla.

La historia comienza con los últimos coletazos de la II Guerra Mundial dentro del bunker del führer, perfectamente recreado en el que incluso hay un momento que puedes sentir el agobio que debían sentir ellos mismos bajo tierra entre las cuatro estrechas paredes donde se desarrolla gran parte de la trama. Paralelamente se nos muestra como los rusos destruían Berlin, que se encuentra sumida en un caos al que los jóvenes soldados, más niños que jóvenes, defienden mientras un Hitler desesperado intenta convencerse de que aun puede ganar la batalla con una última ofensiva aunque le cueste la vida de miles y miles de personas, tal y como dice varias veces a lo largo del film con frases como “En una guerra como esta no existen civiles” o “Si la guerra está perdida, no me importa que mi pueblo sufra. No derramaré una sola lágrima por él”.


Hay tramas secundarias que nos dejan una visión de cómo dentro de una misma ideología política, cada persona afrontaba esa situación tan límite de una forma muy diferente, intentando escapar, suicidándose, luchando ciegamente a pesar de saber que era una muerte segura, dedicando su tiempo a salvar a otros o al menos a intentarlo… Nos deja ver que fue de cada uno de los personajes que estuvieron a su lado esos últimos días, terminando con una ya anciana secretaria personal que da testimonio de lo que vivió en aquél momento más allá de la muerte de Hitler, al que se intenta humanizar pero que a pesar de todo se ve su tiranía, sus delirios y su terrible personalidad, tan trastornado, tan...fuera de la realidad, que se suicida tras ver que su imperio ya se ha hundido y no queda nada más que hacer, junto a una Eva Braun que justo antes de su muerte confiesa que después de tantos años a su lado casi no conoce al dictador.


Lo único que me choca es la aparición de personajes sin una presentación previa, que te hacen tener que adivinar un poco quienes son o por qué estan ahí. En mi opinión podían haber dedicado los minutos sobrantes de algunos diálogos sin fundamento para darles un papel un poquito más extenso y así poder entender un poco mejor algunos de sus actos y apariciones.

Desde luego el rigor histórico, la fotografía, la caracterización y ambientación son excelentes, es más el parecido físico de algunos de los actores con sus personajes es increible. Sin embargo si te gustan las películas bélicas llenas de tiros, bombas, sangre, mutilaciones y demás, aquí poco o nada vas a encontrarte, aunque por otra parte merece muchísimo la pena ver la otra cara del alemán que más muertes ha provocado en la historia desde que el mundo es mundo.

"Morir se me antoja sencillo, será tan solo un momento y después la paz eterna"

VALORACIÓN: Recomendable


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