Uno de los clásicos entre los clásicos. Esta cinta de Alfred Hitchcock ocupa el podio de sus obras más conocidas junto a "Psicosis" (de la que ya nos habló Bdoll) y "Los pájaros". Con el siempre incombustible Cary Grant, la película se va enrevesando de una forma perfecta, de manera que sin saber bien como, pasamos de una cena de negocios al comienzo de la historia a una lucha a muerte en la cima del monte Rushmore. Además, Hitchcock nos deja una de las apariciones más divertidas de todas las que ha hecho en sus películas, cuando pierde el autobús nada comenzar la acción.
El argumento es como sigue: Roger Thornhill (Cary Grant) es un publicista que es confundido con un espía inexistente, inventado por la agencia de contraespionaje americana para despistar a los enemigos. Al ser apresado y no poder revelar ninguna información, los maleantes deciden acabar con su vida una y otra vez.
Estsa película sin duda deja grandes momentos, pero el más inolvidable descansa sobre estas líneas. El ataque con el aeroplano fumigador a Cary Grant en un descampado. Mil veces imitado y parodiado, seguirá siendo único.
VALORACIÓN: Imprescindible
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