sábado, 22 de septiembre de 2012

Invictus


Existen dos tipos de películas que podemos considerar biográficas. Las hay que narran la vida de un personaje desde su nacimiento o juventud, nos cuentan lo que hicieron y cómo murieron (o al menos nos dejan prácticamente en la actualidad si el personaje sigue vivo en el momento del estreno). Y también están las películas biográficas que se centran en un acontecimiento importante de la historia o de la vida de ese personaje y nos lo narran a través de un punto de vista concreto. En este caso nos encontramos ante una película del segundo tipo.


En 1990, Nelson Mandela fue puesto en libertad tras 27 años encarcelado, para posteriormente convertirse en presidente de la República de Sudáfrica. En los primeros cuatro minutos de la cinta se nos da una visión general de la situación política del país en ese momento en forma de imágenes estilo documental. Tras esto, pasamos a acompañar a un Mandela ya instalado en el poder y los quebraderos de cabeza que le da un pueblo dividido aún por el apparthaid. Parece que la mejor forma de unir a blancos y negros es por el deporte, el mundial de rugby que se celebra en el país más concretamente.


Clint Eastwood es un director que, por lo menos a mí, me transmite mucha tranquilidad con sus películas. Tienen un nosequé que me hace quedarme pegadito al sillón sin poder apartar la mirada de la pantalla. reconozco que no es la mejor película que ha hecho, pero es muy buena. Y además, con ella aprenderemos algo más de nuestra historia reciente, que nunca está de más. Tan Morgan freeman como Matt Damon fueron nominados a sendos premios Oscar por sus interpretaciones, aunque no consiguieron llevarse la estatuilla a casa. Pero no creo que quepa duda de que tanto sus actuaciones como sus caracterizaciones fueron geniales. como muestra, esta foto. Arriba los actores, abajo los protagonistas reales:

Una película agradable de ver y que transmite cierta paz. Los distribuidores fueron muy cucos al estrenarla en 2009, un año antes de que Sudáfrica acogiera el mundial de fútbol, aunque supongo que no más que Clint Eastwood al rodarla ese mismo año. Un ejemplo de como un triunfo deportivo puede unir a las diferentes minorías de una nación. Y de eso los españoles entendemos un rato.


"- Entonces... ¿lo del rugby es una estrategia política?
 - No. Es una estrategia humana"

VALORACIÓN: Buena


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